lunes, 25 de noviembre de 2013

Las promesas rotas de los presidentes de gobierno.



Me ha sorprendido hoy Carlos Alsina comentando el libro de Zapatero. Le daba mucha caña a raíz de la confesión que hace de haber tenido que tomar algunas decisiones, sobre todo una, en contra de su propio discurso programático, y presionado por Europa. Me ha sorprendido porque se mostraba muy crítico e irónico, el locutor, sobre la falta de sentido de la realidad de ese discurso previo, por lo que la cruda realidad del ejercicio del poder le obligó a "poner los pies en el suelo".

A mi me parece que eso no sólo le pasó a Zapatero. Le pasó a González, le pasó a Aznar, y desde luego le está pasando a Rajoy. Los puretas críticos suelen escandalizarse de lo fácilmente que los que están en el poder toman ese tipo de decisiones, y de lo fácilmente que la gente, sobre todo SU gente, se lo perdona.

Esta mañana con el otro Carlos, el "Herrera", Julio Anguita hacia otro de sus característicos alardes de su intransigencia programática ("programa, programa, programa...") que tanto respeto le supuso, incluso por gente "de la derecha" (me consta). Y siempre con el retintín de lo necia que es la gente que perdona tales conductas, que probablemente ni siquiera se lee los programas.

Pues bien, en lo que a mí respecta, no tengo ningún reparo en confesar que en mi vida me he leído un programa político. Creo que alguna vez intenté echarle una ojeada a alguno, muy al principio... y no entendí nada. A ver, entendía lo que decían, pero no tenía ni idea de la relevancia y al verosimilitud de lo que leía. No tengo ni idea de política ni de economía... Sí, puedo encontrar propuestas más o menos atractivas por parte de este o aquel candidato. Pero ocurre que no he nacido ayer, y sé perfectamente que dirán esto y lo otro ahora, pero que después, cuando estén en la cruda realidad de la responsabilidad del poder global, la RESPONSABILIDAD MÁXIMA, harán lo que puedan.

¿Y entonces qué hago? ¿Me inhabilita eso como votante?. Claro que no. Sencillamente voto con otros criterios, criterios que, si bien no pasan mucho por la racionalidad, no necesariamente por eso son menos válidos; o no mucho menos. ¿Qué hacemos cuando tenemos que contratar un técnico para que nos haga una reparación sobre algo de lo que no tenemos ni idea?  No hace falta pensar en un cirujano, o siquiera un informático, un fontanero basta. Pues recurrimos a nuestra psicología (la ciencia primigenia de todo ser humano) y decidimos cual de los candidatos nos inspira más confianza. Los determinantes de esa decisión son otra cuestión... y ahí pueden condicionarnos identidades y militancias más o menos conscientes, y más o menos racionales. Pero estoy seguro de que esas distorsiones afectan menos, y a menos gente, de lo que podría creerse, y de la  perogrullada de que estadísticamente a la gente le ofrece más confianza el que objetivamente muestra una imagen más digna de confianza. Y de que una imagen más digna de confianza la tiene el que en ese momento ES más digno de confianza.

REsumiendo: que cuando votamos sencillamente "sentimos" que "toca" votar a tal o cual. Cómo llegamos a tener tal tipo de "sentimiento" es harina de otro costal; un costal no muy racional pero no por eso necesariamente absurdo. Eso es lo que hacemos cuando votamos a un político. Y por eso perdonamos tan fácilmente que se salten sus promesas. Porque la mayoría de nosotros ni siquiera conocemos esas promesas. Y como lo hemos votado porque el nota nos inspira confianza, sencillamente damos por sentado que si ha roto una promesa, es porque tenía que hacerlo.

viernes, 15 de noviembre de 2013

ALICE MUNRO 3. (La erótica del poder)



Sigo totalmente enganchado a los relatos de A. Munro. Me gusta mucho esa sensación de la realidad empapada de frescura cotidiana, que parece que estés escuchando chismes familiares en la cocina de la casa familiar. El caso es que en lo que llevo leído empiezo a encontrar algunas pautas características, que merecen comentario.

Para empezar los hombres, claro. Podría decirse que para Munro, y para muchas mujeres, los hombres se dividen entre los tontainas presuntuosos, y los simplemente tontainas. Unos y otros comparten una especie de gilipollez adolescente consistente en estar imbuidos en su mundo particular, más o menos interesante, e incluso talentoso, pero desde luego muy lejos de la refinada, sutil y entrañable realidad femenina. Eso si, progre y “liberada” como es, hasta el punto de abusar, en su propio discurso, del adulterio, no renuncia en cambio a los referentes clásicos del mundo femenino, la ropa, la moda, la cocina, el hogar, la familia, que asoman una y otra vez, dándole a sus relatos esa sensación entrañable de la que hablaba.

La pauta característica consiste en que la chica se enamora fatalmente de un gilipollas del primer tipo, presuntuoso y seguro de sí mismo, incluso consciente de la miseria humana que se esconde bajo esa pose poderosa. Y fatalmente es fatalmente. Una abdicación total con armas y bagajes:

Se pregunta a sí misma qué le dio a él su poder. Ella sabe quién lo hizo, pero pregunta qué y cuando…, ¿cuándo tuvo lugar la cesión?, ¿cuando se produjo la abdicación de todo orgullo y sensatez?
(Alga marina roja)

El relato luego consiste en el desarrollo fatal de esa antinomia, de forma característica cuando el tipo resulta que está casado, y sencillamente vuelve al redil familiar.

¿Cómo, porqué, esa abdicación de toda sensatez? Supongo que la funcionalidad del fenómeno (de ese instinto) es la necesidad de seguridad. Esa seguridad que nos dan la gente con poderío, aún cuando sabemos que es fatua e impostada. Por no decir cuando se trata de pura “jeta” desconsiderada, o como se decía antes, un sinvergüenza. Sin-vergüenza. La erótica del poder.

¿Recuerdan la desdichada protagonista de “El tercer hombre” poniendo toda su enorme dignidad a los pies de un delincuente psicópata?

miércoles, 6 de noviembre de 2013

secretos discretos

El curioso episodio de la comparecencia del General Sanz Roldán ante la Comisión de Secretos Oficiales ha dado lugar a una serie de comentarios sobre la capacidad de persuasión, o de seducción, de dicho General frente a los diputados, que ha salido todos de la sesión la mar de tranquilos y conformes con la comparecencia del jefe del CNI. Incluso los más izquierdistas, tradicionalmente más hoscos y críticos hacia este tipo de actuaciones e instituciones de los gobiernos centrales. Surge una broma obvia. A ver si lo que ha ocurrido en la comparecencia es que el jefe del CNI, haciendo oficio de su condición, lo que ha revelado es una porción suficiente de los dossieres de unos cuantos diputados, presentes o no en la comisión, lo suficientemente substanciosa como para "tranquilizar a sus señorías" ¿Se imaginan al General con el soniquete de Gila diciendo cosas como: "...por aquí hay alguien cuya esposa le produce dolores de cabeza .... u otro al que los dolores se los produce los chutes de droga que se mete ... u otro al que los dolores de cabeza se los produce las gamberradas de su hijo pequeñooo..." Al fin y al cabo, como dijo aquel castizo, "oficio obliga" ¿no?

domingo, 27 de octubre de 2013

Alice Munro (2)

Mujeres. Un mundo femenino, y por momentos muy femenino. Por ejemplo, no desdeña hablar de la ropa largamente. Sisas, fruncidos, satén… todo un vocabulario iniciático, que denota un modo de vida y una dimensión de la realidad, que solo perciben eso: los iniciados. Como el sugestivo lenguaje de los marineros. Hombres que quedan al margen. No se ensaña con ellos; con frecuencia incluso son bien tratados. A veces los mira en la distancia, como unos animales curiosos, con los que se está muy vinculado. Como un cazador de las praderas miraría a los bisontes de la manada a la que acecha constantemente. Pero están excluidos de ese mundo de delicadezas, de fragilidades, de exquisiteces, como el fantástico y abigarrado mundo del coral, al que solo pueden acceder organismos altamente sofisticados…

jueves, 24 de octubre de 2013

ALICE MUNRO (1)

   Dia de optimismo.  En Onda Cero tanto Herrera como Fidalgo coinciden en el punto de optimismo, o de esperanza como ha puntualizado uno de ellos, de los datos económicos. Y esta noche he tenido un sueño formidable en el que una mujer poderosa y bella (sin entrar en detalles) me daba un abrazo cálido y cómplice (tampoco hay muchos más detalles) dándome ánimos para seguir adelante.

¿adelante?  (...más adelante)

   Y en estas quiero aprovechar para saludar al nuevo astro de mi universo: la escritora Alice Munro. Para empezar es una mujer bastante bella. Hela aqui:


Además, por las fotos que he visto, casi está más hermosa, ahora en su madurez, que con unos años menos. Quiero creer que la sabiduría y la serenidad también se reflejan físicamente. Desde luego tiene una son-risa resplandeciente, y en la foto que he escogido (espero no tener problemas porque es muy corriente en todas sus portadas y en internet) se refleja  un sereno sosiego y una placidez elegante, que desde luego casan muy bien con el éxito mundano que ha alcanzado esta maravillosa escritora con su prosa nítida y profunda.

    Llevo tres relatos leídos (el de Júpiter, Dimensión y Secreto a Voces) y estoy totalmente encantado. No sé qué destacar de su prosa. Son relatos todos de mujeres. Mujeres que no son ni buenas ni malas, ni muy listas ni estúpidas... con sus limitaciones y miserias... pero siempre con una aceptación de la realidad, una lucidez cristalina, capaz de encontrar la absoluta y puntual felicidad de dar con el sentido metafísico del universo en la tostada y el café que estamos tomando esta mañana junto a nuestro malhumorado cónyuge.

   Ese fulgor mágico que aparece al doblar cualquier esquina, que nos sorprende, y que nos anima a seguir adelante...   seguir adelante (por eso: ¿adelante?).

   Yo la saludo con respeto y entusiasmo, os la recomiendo con absoluta convicción  ...y lo dejo aquí porque, enseguida, según vaya leyendo sus relatos, habrá más.




                                       

domingo, 22 de septiembre de 2013

ROBERTO ZUCCO. UNA CRÍTICA SESGADA


    Acabo de asistir al estreno, en el  Matadero de Madrid, de una versión de “Roberto Zucco “, obra póstuma del dramaturgo  francés Bernard-Marie Koltès, autor maldito donde los haya, muerto de sida  en 1989, a los 42 años de edad. Autor de culto en el mundo teatral, surrealista y al mismo tiempo  renovador de cierta estructura clásica de la obra teatral (las tres unidades), no es ciertamente una crítica experta lo que me corresponde, profano  como soy en lo que se refiere al teatro, que además, como todas las artes, es cada vez más iniciático. Pero a lo que no me resisto es a hicarle el diente profesionalmente, dado que el personaje y la historia tienen un indudable bocado psicológico.  Ustedes juzgarán.

Sería tentador situarlo en la galería de ilustres "asesinos simpáticos", en compañía de personajes tan memorables como Annibal Lecter o Vito Corleone, que tienen en común unas víctimas odiosas y/o estúpidas con las que se ganan la complicidad de los espectadores en un juego de proyecciones al mejor estilo Freudiano (“buenos son los que se conforman con soñar lo que los malos efectivamente hacen”). Pero no; lo de Koltés no es tan tosco, y ciertamente no está por la rentabilidad de masturbar las bajas pasiones del gran público. ¿Porqué no mata al hermano macarra, como esperamos desde el comienzo de la obra, y en cambio sí al niño del parque, hijo de uno de los pocos personajes que llegan a “conectar” con el desdichado y archisolitario Zucco?.

La señora del parque. Uno de los poderosos personajes femeninos que jalonan una obra en la que el protagonista empieza por despacharse a su propia madre. En ese primer crimen uno piensa que va a ir en la línea del mencionado asesino justiciero, o terapético, cuando nos entran ganas de gritarle a la madre.”¡pero tía, déjale entrar y que se lleve lo que quiere¡”. No; como digo la cosa no va por ahí, y en el sentido  de violencia cinematográfica que uno se teme cuando entra en el teatro avisado sobre la dureza de la obra, mas bien decepciona un poco. La naturaleza de la violencia de esta obra, la conmoción que provoca, es más sutil y puede tardar incluso días en hacerse patente.

La madre. Empieza por cargarse a su propia madre. Creo que es una de la claves. Y luego la señora del parque, que parece despreciar al mundo entero casi más que el propio Zucco, incluído a su propio hijo, que corretea por ahí en chándal; “es un gilipollas” dice de él su propia madre. Solo varios compases después de que él se lo cargue casi gratuitamente, ella se lo recrimina violentamente “¡¡era un gilipollas, pero era mi hijo!! ¡¡ MI hijo!!…¡¡ algo totalmente MÏO ¡!… “ 

  ¿Hace falta más?    En la primera entrada de este blog comentaba el pelotazo psicoanalítico de Malic en su película “el árbol de la vida”, en la que adornaba con conmociones galácticas el formidable  conflicto emocional que debió tener con su padre (el “toque National Geografic”, como lo llamó mi colega Mª Jesús).  No te digo nada cuando el conflicto no es con el padre, sino con la madre, mucho más raro, y mucho más devastador. El conflicto con el padre nos lleva a un conflicto con la autoridad y con las normas sociales que puede hacer de nosotros "un rebelde" más o menos inadaptado. El conflicto con la madre nos lleva a un conflicto con la propia vida, a un cuestionamiento radical de la propia identidad que puede devenir en patologías graves, incluída la psicosis.

Una obra nada convencional, profundamente perturbadora, y representada con gran eficacia  por un grupo de excelentes actores venidos de Barcelona (¡hablando de identidades…!). De entre ellos sin duda  hay que destacar el formidable trabajo como protagonista de Pablo Derqui, actor de raza con recursos, capaz de pasar del cándido arrobamiento en una escena de amores adolescentes, a la inquietante mirada de un asesino psicópata que mata por puro impulso, pasando por la rabia infinita del hijo despechado, o por la ternura desconcertada del que presencia el sufrimiento que crece constantemente en los márgenes de la pista de baile social...  Para no perdérselo.




lunes, 9 de septiembre de 2013

El fiasco olímpico de Madrid



¿Qué porqué no nos los han dado?   Muy sencillo: porque no tocaba.

¿Cuál ha sido el error? : pedirlos demasiado pronto después de los de Barcelona.

     Y otra conclusión rápida; lo que Madrid hubiera necesitado es un Samaranch. ¡Ah, pero tipos como ese salen uno por lustro! (echad una ojeada a su biografía). En este caso arrastró la Olimpiada a casa (que en ese caso era Barna, Spain), y al hacerlo colmó las opciones de España para unos cuantos lustros.

     La pregunta correcta no es por qué no nos los dieron, sino porqué tendrían que habérnoslos dado. Sin entrar en detalles, está claro que la organización de las Olimpiadas se rige entre otras cosas por un complejo y delicado equilibrio de geoestrategias planetarias.  Seguro que una buena organización y una buena presentación influyen, pero dudo mucho que sean el factor más importate.

     Muy pocos países han organizado más de una Olimpiada.  Y claro, los grandes… sobre todo los grandes entonces. Inglaterra, Francia…¿Una excepción? Los USA, claro, que han organizado 4 (Pero es que los USA son mucho USA, ya entonces ). Otra excepción curiosa, pero poco notoria: Australia, que ha organizado 2. 

     En las últimas repitió Londres; ¿cuando fueron sus olimpiadas anteriores? en el 62; es decir, habían pasado 50 años. Ojo a ese dato.

     Y ahora, con la globalización, a la que se ha vuelto muy sensible, el Comité olímpico anda muy preocupado balanceando las concesiones a nivel planetario, siendo como ya es una de las organizaciones globales más consolidadas, 


¡ Oh, es que hemos sido muy buenos, y hemos hecho muy bien los deberes!.  Sí, seguro que ese es un requisito importante… pero solo uno de los muchos.  

   ¿Una conclusión práctica? Pues que, antes de volver a intentarlo, que haya pasado un plazo  no menor de 50 años desde el 92. Es decir, creo que es inútil intentarlo antes del 42  ...como mínimo.

     Bromita para la siguiente entrada: ese plazo podría acortarse por convulsiones geoestratégicas: quizá la secesión de Cataluña acortase ese plazo... Pero esa es otra historia; quédese para otra entrada. 

jueves, 1 de agosto de 2013

Comparecencia de RAJOY

   Me gustó presidente. Creo que nos sorprendió a todos al entrar con toda la energía llamándo (¡por 1ª vez!) a Bárcenas por su nombre, y con su resumen en dos palabras: "Me equivoqué".

   También me gustó su declaración inicial de "No voy a recurrir al "y tu más"" que cumpló escrupulosamente al no mencionar ni una vez el asunto de los ERE en Andalucía.

   Luego Rubalcaba tampoco estuvo mal. Le dio donde le dolía, y administró bien los SMS, al parecer el único registro objetivo de contactos entre Rajoy y Bárcenas, intentado demostrar   que en el PP sí estaban al tanto de las actividades del angelito, y que por lo tanto de lo que se trata es de una situación de financiación ilegal.

    Yo creo que la cosa quedó en tablas. También me llamó la atención la atribución a Soraya del buena parte del discurso. Mucha bolilla le están dando a la muchacha, empezando por el lapsus de Gallardón llamándola "presidenta"   ¿La proxima candidata del PP? 

jueves, 18 de julio de 2013

¿Quitar a Rajoy para poner a quien?

    No es por tirarme el pegote, pero parece que los acentecimientos van dando razón a mis reflexiones en la anterior entrada. Por lo demás eran bastante de cajón. El propio Rubalcaba, a quien tengo por uno de los mejores políticos de este país, reconocía que la movida no iba a servir para lo que se supone que sirve, cambiar al gobierno o por lo menos a su presidente, pero que podía ser un intrumento eficaz para obligar (¡OBLIGAR!) a Rajoy a venir al parlamento a dar explicaciones.

   Para no hacerlo Rajoy dice que que ya ha dado explicaciones, y que se niega a que su agenda se la marque un delincuente. Conviene que no insista en esto último, porque como muy bien le señaló Rubalcaba, "¡Es que ese delincuente era SU deñioncuente!". En todo caso creo que los comentaristas se rasgan demasiado las vestiduras (más de uno acabará en pelotas) porque el presidente se atrinchere en su mayoría absoluta para hacer lo que le da la gana y no hacer caso de rivales y periodistas.

   Quiero creer que está concentrado en la recuperación económica, y que no quiere dedicar ni media neurona a ese asunto, sabiendo que estará en una posición mucho mejor si efectivamente los parámetros econòmicos empiezan a mejorar. Pero, claro, de ahí a argumentar que no conviene airear este asunto porque es malo para la recuperación económica... ciertamente que es un factor que tácitamente flota en el ambiente, y creo, como psicólogo, que influye sobre la finalmente bastante desinflada indignación de la oposición... Pero hay cosas que, aunque sean evidentes, nunca pueden decirse explícitamente.

   He ahí una muestra más del delicado equiligrio entre la racionalidad humana (individual y colectiva) y su  inestable emotividad en el que, aunque dirija la primera, o lo intente, la última palabra las tiene siempre la última.

    Total: que creo que el Presi hace bastante bien en jugar a los silencios, de los que dice mi admirado proverbio que uno es dueño, mientras es aprisionado por las palabras. Eso sí, me encantaría que hiciera una declaración con un comnpleto mea culpa, reconociendo los errores cometidos, los muchísmos "listos" que se le cuelan, como a todo partido grande, y reafirmado su voluntad de fulminarlos en cuanto se les detecta. Y pidiendo disculpas. Tal vez lo haga si se afianza la recuperación; ahí mi Esperanza... y mis Dolores ¡y mi Soraya!. (¡Menudo gineceo se gasta el PP!, solo por ello ya tiene unos cuantos puntos Mariano)

domingo, 14 de julio de 2013

Bárcenas, Rajoy, Rubalcaba y Cospedal

    Los partidos rupturistas, básicamente los de izquierdas, se tiran como lobos al cuello de Rajoy. ¿Como no? ¡menudo bocado les ha salido con esto de que al partido en el poder se le esté quedando el culo al aire!

    PERO creo que en primer lugar al Parido Socialista le interesa más bien poco hacerse ahora con el poder, teniendo los follones que tiene en sus propias filas, y estando la crisis como está. Pero se ve obligado a responder a la exultante beligerancia  de sus bases asumiendo una indignación que resulta bastante formalista.

   POR OTRA PARTE, no disimulando mis simpatías por Mariano Rajoy, intuyo una estrategia general de "ser dueño de sus silencios", de dejar salir todo este follón calculando que su climax coincida con un comienzo de la recuperación económica, que serviría para hacer olvidar todas las amarguras que se le vienen encima al PP.

   Dicen que quieren tumbar a Rajoy  ¿Para poner a quien?

   Y otra cosa, también a tono con mis confesadas simpatías y antipatías: El grueso de la gestión de Bárcenas coincidió con los mandatos de Aznar, lo que da una razón más para que se esté calladito, y aproveche para hacer exámenes de conciencia.... si es que puede.

   Y una última nota: la animadversión declarada entre Bárcenas y Cospedal. Yo soy más de la Vicepresidenta que de la Secretaria del partido,  Cospedal, a la  que no dejo de reconocer la hechura de una hembra poderosa y atractiva. En todo caso es la que mejor parada sale en toda esta marejada porque parece ser que era notorio su beligerancia contra Bárcenas, y que a ella se debe el  que el partido por fín se decidiese a deshacerse de él. Curiosidad tengo por su declaración.

domingo, 9 de junio de 2013

REBELDÍA ESPURIA (Cataluña Espanya 14)

     Hay factores que distorsionan el impacto social de todas las ideologías rupturistas, entendiendo por tales aquellas que están por cambiar el estutus quo de la situación presente,  porque  lo   consideran pernicioso, y en las que  podemos incluir, a grandes rasgos, a los partidos nacionalistas y a los de izquierdas.  Voy  a ocuparme de un par de ellas que son  básicamente de orden psicológico.

     En primer lugar el fenómeno que he dado en llamar "modelo de la rata pringada". Las frustraciones hacen que la gente sienta necesidad de agredir a alguien, ¿y qué mejor que el poder constituído?. Sobran mayores explicaciones, sobre todo porque ya he dedicado una entrada al tema.

    Y en la misma linea psicologísta, en segudo lugar está lo que considero una de las obras maestras de Freud: "El malestar en la cultura".  Una de las constataciones más formidables del genial creador del psicoanálisis. La idea básica, en términos de Freud, es que cuanto màs avanzada y más sofisticada es una cultura, más exigente es en el control instintivo de los individuos que la componen, siendo los dos principales los instintos ligados a la reprioducción, la líbido, y los ligados a la defensa, la agresión.

     De manera que, cuanto más evoluciona una sociedad, aunque los individuos viven objetivamente mejor, cosa que confirman por ejemplo los economistas (en términos generales, cualquier momento de la historia se vive mejor que en cualquiera de los anteriores), lo cierto es que subjetivamente los individuos se sienten peor. Por decirlo gráficamente: los suecos protestan más de su gobierno que los marroquíes.... y piénselo bien   ¿es simplemente porque son "más listos"?

      Recuerdo que, al menos en lo que se refiere al nacionalismo vasco, son conscientes de esa distorsión. Recuerdo perfectamente un artículo de ese medio (en Eguin, o tal vez uno de aquellos análisis que hacía la propia ETA) antes de que las cosas se encabronaran con el secuestro de Ortega Lara y el asesinato de Miguel Angel Blanco. Un análisis que decía precisamente la necesidad de ser conscientes de que mucho del apoyo social que recibían provenía de gente a la que sencillamente "le iba la marcha". Bastaba pasearse por las calles de Euzkadi en aquellos entonces para constatar el tipo de personal que se apuntaba a las movidas nacionalistas.

   Otra anécdota vinculada. No recuerdo bien los detalles (si alguien quiere documentarlo le estaré muy agradecido), pero venía a ser que en ciertas europeas Herri Batasuna se vio obligada a presentarse en todo el territorio español. Ellos mismos se quedaron muy sorprendidos cuando, por ejemplo, en Madrid sacaron algo así como 30.000 votos...

   Ni que decirse tiene la incidencia que tiene este fenómeno en movimientos del tipo "Indignados". Estos ni siquieran disimulan, o lo hacen apenas, y es lo que los convierte en un fenómeno que, aunque sociamente puedan alcanzar una cierta relevancia, políticamente sean  a la larga casi inofensivos. Es lo que ha ocurrido con el movimiento de Beppe Grillo. En cuanto llegasen a organizarse, pasarían a formar parte del sistema.

Un tema ciertamente interesante. Volveremos sobre ello

sábado, 8 de junio de 2013

In vino véritas

    Hace años leí la frase: "No se puede confiar en alguien que no se emborracha nunca."  Ahora, gracias a la mágica potencia de Internet y Google he conseguido dar con el autor, o por lo menos con un autor que dice algo parecido. Se trata de James Crumley, un escirtor americano de novela negra, en una que precisamente está traducida (Un caso equivocado / The Wrong Case (1975)). El párrafo es lo suficientemente explícito por sí mismo:
     Puesto que la traducción es mía (con la ayuda de Google), la transcribo sin más:

      Hijo, nunca confíes en un hombre que no bebe porque probablemente es una especie de fariseo, un hombre que siempre cree saber lo que está bien y lo que está  mal. Algunos de ellos son buenos, pero por Dios que causan la mayoría del sufrimiento del mundo. Son los jueces, los entrometidos. E, hijo, nunca confíes en un hombre que bebe pero no quiere emborracharse. Normalmente tienen miedo de algo que tienen dentro, en el fondo, ya sea que son cobardes, o tontos, o malos y violentos. No se puede confiar en u)n hombre que tiene miedo de sí mismo. Pero hijo, a veces, sí puedes confiar en un hombre que de vez en cuando tiene que  arrodillarse ante un retrete. Lo más probable es que  está aprendiendo algo sobre la humildad, sobre su natural necedad humana, y sobre cómo sobrevivir a sí mismo. Es la leche de difícil que un hombre se tome a sí mismo demasiado en serio cuando está echando las tripas en un inodoro sucio.

                                                                  James Crumley "Un caso equivocado" (1975)

     A lo mejor es para justificarme. Pero este fin de semana estuve en Barcelona, donde me lo pasé estupendamente, ¡Ah Barcelona! y donde entre otras cosas me vi (por separado) con mis dos amigos Jordi y Carlos. Con los dos bebí demasiado (gin tonics, que están de moda) especialmente con el primero, con el que acabamos en "Boadas" cerrando el local, tras abrirnos paso por entre las mesnadas de turistas. Luego no dejé de sentirme un poco mal por aquello de "a mis años, cogiendo una cogorza...!"  por eso me consuelo con la sentencia de Crumley.  Tampoco a él hay que tomárselo demasiado en serio. 

jueves, 30 de mayo de 2013

Centralismo / Federalismo

    El respetadísimo Pierre Vilar nos cuenta en su Historia de España que el  siglo XVIII vino acompañado de grandes cambios demográficos y económicos.  Es probable que tales cambios sociales requiriesen de gobiernos más complejos, e inevitablemente más centralizados, lo que seguro tiene que ver con el advenimiento de Monarquías mas centralizadas, como la de los Borbones en Francia y en España.    Viene el tema a cuento del prestigio entre ciertos intelectuales del federalismo, como una forma de gobierno más liberal o más respetuosa con las libertades individuales.

    Desde el enfoque sistémico que se asume en este blog, quiero recalcar que el asunto es endemoniadamente complejo. Los defensores de los gobiernos centrales fuertes argumentan su pertinencia para defender a los individuos más débiles, al pueblo llano, precisamente de los excesos de poder de todo tipo de señores, mafiosos y bandoleros que tienden a surgir en todo cuerpo social. Es decir, de las estructuras políticas de bajo nivel, o de las diversas formas de feudalismo, entendido en un sentido muy amplio.

    En ese sentido es muy interesante el debate que, más o menos por esa misma época,  se planteaba en el surgimiento de los Estados Unidos. Los grandes padres de la patria americana, en el congreso constituyente de Filadelfia de 1787,  pugnaron por un gobierno central fuerte, frente a una Federación descentralizada, precisamente por ese motivo. Uno de los delegados, Gouverneur Morris,  dijo una famosa frase a respecto: "Mejor es tener un Gobierno supremo ahora, que un dictador dentro de veinte años."
    Y también es interesante la homología biológica de que los grandes organismos han evolucionado en el sentido de centralizar e hipertrofiar los tejidos de control, es decir, los tejidos nerviosos. Por supuesto que es delicado asimilar el órgano de control  orgánico, el cerebro, con el organismo de control social, el gobierno. Puro organicismo, que tiene muy mala prensa. Pero, se interprete como se interprete, a la analogía estructural está ahí.

     Por otra parte, tampoco es evidente que el feudalismo sea siempre tan malo. Quizá hay en esa valoración una cierta manipulación de los poderes centralizados. Muy complicado, ya digo.

Victus (Catalunya España 13)


     En línea con la serie de entradas que dedico al conflicto entre Catalunya y (el resto de) España, es fácil ver que  abunda la desconsideración y la demagogia por ambas partes, así como también las consideraciones desmitificadoras, también por ambas partes. Escuchando a Fidalgo y Leguina en Onda Cero,por ejemplo,  sigue pareciéndome que nos pasamos de sarcásticos con la movida de los catalanes, lo que me desasosiega especialmente por ser líderes de opinión que tengo en aprecio; debe ser por la parte de catalán que habita en mi identidad.

    Sobre la de la novela Victus,  y su  historicidad así como su peculiar tratamiento de los personajes, he visto que hay mucho en Internet. Sobre la arenga final  de Villarroel, que originalmente consigné citando a Wikipedia,   la he encontrado abundantemente confirmada.  Por ejemplo en la siguiente página, pinturera y pintoresca, pero  bastante documentada : ( http://www.11setembre1714.org/index2.html ). Poco sospechosa de españolismo, puesto que es catalana,  aunque también se afana en la denuncia de del uso demagógico de los hechos por ambas partes. En lo que se refiere a Villarroel y su arenga cita la obra del cronista catalán Castellví,  contemporáneo de los hechos, y del que tomo este párrafo:

   Avisado el general comandante y reconocida la parte de Palacio, y toda la linia que ocupaban los sitiados hasta San Agustín, exhortó a todos con blanda y animosa resolución con estas palabras:"Señores, hijos y hermanos: hoy es el día en que se han de acordar del valor y gloriosas acciones que en todos tiempos ha ejecutado nuestra nación. No diga la malicia o la envídia que no somos dignos de ser catalanes y hijos legítimos de nuestros mayores. Por nosotros y por toda la nación española peleamos. Hoy es el día de morir o vencer, y no será vez que con gloria inmortal fue poblada de nuevo esta ciudad defendiendo la fe de su religión y privilegios".
Francesc de Castellví i Obando (1682-1757)
"Narraciones Históricas desde el año 1700 al 1725" ; Vol IV, pag. 249

         Por otra parte que el cronista sea catalán y contemporáneo tampoco es garantía de ecuanimidad. A lo mejor era un "botifler".

   También es fácil encontrar a Sánchez Piñol en diversas entrevistas y artículos,  recibiendo grandes alabanzas  por parte de los especialistas historiadores. Lo que está claro es que se documentó a fondo, puesto que al parecer se pasó diez años escribiendo la novela. Es interesante y representativa su opinión de que el 11 de Septiembre no sólo fue el final de Catalunya (de una cierta Catalunya), sino también el de una cierta España, más liberal, federal y deseable. El asunto cobra actualidad. Creo que de todas formas Piñol no renuncia a un esquema de buenos y malos, estos últimos representados por los centralistas y despiadados  Borbones, que ya reinaban en Francia.

     Desde el enfoque sistémico que se asume en este blog, no puedo menos que pensar que las cosas no ocurren por casualidad, ni por el capricho de gobernantes  más o menos listos y/o despiadados. Como muy bien señalaron los marxistas, la historia de la humanidad es un asunto sumamente complejo. El respetadísimo Pierre Vilar nos cuenta en su Hisotria de España que el advenimiento del siglo XVIII vino acompañado de grandes cambios demográficos y económicos, que probablemente requiriesen de  gobiernos más complejos, e inevitablemente más centralizados. Dada la entidad que toma el asunto, abordo el tema en la siguiente entrada:  "Centralismo/Federalismo".



    

domingo, 26 de mayo de 2013

ZAPATERO (vs Fidalgo y Aznar)

    Una celebrada frase del Quijote  dice que no hay libro por malo que sea que no tenga algo de bueno; es una sabia afirmación que podemos extender también a las personas y, siguiendo la enseñanza de Merlín que hemos comentado hace poco, a todas las cosas del mundo mundial. Dado las exitosas entradas sobre los políticos mencionados en el título, y dado el vapuleo que desde tantos frentes recibe habitualmente el expresidente Zapatero, me viene de cara contar un par de cosas buenas de él.

    Una fácil: lo discretamente que está llevando su condición (de expresidente) (...socialista), tras su también discreta salida por el foro de la política. Algo en lo que incluso muchos de sus críticos están de acuerdo.

    Y otra más dolorosa para mí, dada mi condición de monárquico. Se trata del acto, de nefasto recuerdo, en el que el Rey  perdió los nervios frente a Chávez (muy comprensible, pero no fue su mejor día) solicitándole amablemente que terminase con su turno de palabra. Pues bien, el que en estuvo francamente bien en ese lance fue precisamente Zapatero. Todo empezó con algunos comentarios (mas bien adversos) del mandatario venezolano sobre el expresidente Aznar. Entonces Zapatero estuvo muy a la altura saliendo en su defensa, diciendo algo así como que, a pesar de sus diferencias ideológicas, no deja de ser un expresidente de su país... ect... Y como Chávez se empecinara, fue cuando el Rey...ect.

    Pues eso, que ahí estuvo Zapatero verdaderamente formidable.

viernes, 24 de mayo de 2013

La inmersión lingüistica. (Catalunya España 12)

   
    Quizá uno de los factores que tiende a agravar la escalada emocional entre españoles y catalanes es lo mal que se toman por estos pagos (Espanya) todo lo que se refiere a la promoción de la lengua catalana. Eso por la parte que nos toca. Fue el mejor jefe que he tenido en mi vida de currito, un ingeniero textil mayor, muy culto, proveniente de una ilustrada familia Sevillana, Don Jose María M., el que me hizo ver lo errado de esa postura. Hombre cultivado y cabal, aficionado a la lingüística como buen humanista,  me señaló un día que el que en España se hablasen otros idiomas además del castellano era una tremenda riqueza, que de ninguna manera había que perder.

    Pero el común de los españoles (y me temo que ahí podemos incluir a los catalanes) tenemos la autoestima colectiva demasiado deteriorada, e inevitablemente reaccionamos con dolor y rabia a cualquier cosa que atente a la unidad de nuestra identidad, la maltrecha identidad española. Y de ahí esa nefasta tendencia a agredir a cualquier otra identidad alternativa que la merme,  con sarcasmos, burlas o deslegitimaciones. Una actitud que, en el mejor de los casos, bien podemos calificar de cateta.

    Pero por otra parte tampoco los catalanes se quedan cortos en pagarnos con la misma moneda, y no faltan entre ellos las expresiones de menosprecio y negación de cuanto se refiera a "lo español".  En esta tesitura es donde quiero comentar la manida "inmersión lingüística" y la insólita agresividad y suspicacia con la que reaccionan frente al intento del ministro Wert de introducir el castellano en la enseñanza en Catalunya. En el furor de la escalada creo que pierden el sentido de la realidad hasta extremos verdaderamente ridículos, que es lo que pasa cuando uno se deja llevar por la rabia.  ¡Es impresionante lo que llegan a decir del ministro!

   Dicho lo del principio quede claro que estoy totalmente a favor de tomar las medidas que hagan falta para promover el uso del catalán. Y en ese sentido no dejo de entender la contundente medida de la inmersión lingüistica. Lo entiendo, pero creo que  llevarla hasta el extremo que lo llevan constituye un gigantesco error.

     Fijaros (a los catalanes): el hecho es que ahora se enseña en catalán y que las autoridades catalanas se oponen taxativamente a que se enseñe en castellano. A efectos prácticos es como si la enseñanza en castellano estuviese  prohibida... ¡Es como si los catalanes hubiesen introyectado los métodos franquistas!.

  Repito: Actualmente se enseña todo en catalán; y cuando desde Madrid, si, desde Madrid, se intenta que se pueda enseñar también en castellano ¡ay que ver las reacciones!.. y las manipulaciones. Recuerdo por ejemplo las declaraciones de un admirado futbolista del Barça, un hombre al que por su inteligencia y visión del juego los periodistas llaman "el arquitecto" declarando: "a mi me parece muy mal que se intente prohibir el catalán".  ¿Prohibir el catalán?... ¿Cuantos catalanes hay pensando lo mismo?

    …O formulando ese pensamiento para justificar sus sentimientos (oficio obliga).

    Estoy dispuesto a admitir que quizás no haya más remedio que recurrir a una "inmersión" de un tipo u otro. Pero esa furiosa radicalización que distorsiona los hechos  hasta ese punto creo que es un auténtico desastre, y desde luego no creo que contribuya a mejorar la imagen de los catalanes en el resto del mundo, cuestión a la que tan sensibles sois (como todo el mundo). ¿Qué creeis que pensará un inglés o francés que atienda a los hechos mencionados?..

    De momento habéis conseguido que algunos de los mayores talentos de Cataluña se hayan pasado al bando españolista (Serrat, Boadella...), aquellos que dado su enorme éxito en el pasado pueden permitirse el lujo de "pasar" de la opinión de sus paisanos. Lo digo porque estoy seguro, me consta, que hay muchos  catalanes  que no comparten  esta exaltación nacionalista. Pero ¿quien se atreve a llevar la contraria a semejante  tsunami cultural?  Por que lo chusco es que ahora hablar castellano, en Cataluña, es oponerse al poder constituido… ¡justo lo contrario de lo que pasaba en tiempos de Franco!. Y tal vez mis percepción esté distorsionada, pero me parece que en las calles de Barcelona se habla más castellano que nunca.

    Está bien traída la frase del Sanchez Piñol cuando comenta el valor que derrocharon todos los Barceloneses en el asedio de 1714: "Hace falta mucho valor para ser cobarde cuando toda tu ciudad te está mirando”.  Una vez levantada la bandera de la unidad agredida… ¿Cuántos habrá que la sigan simplemente porque “les están mirando”?.

jueves, 23 de mayo de 2013

Fidalgo, Aznar y Zapatero

   De nuevo Fidalgo manifiesta la buena forma recuperada, y yo reitero mi consideración como uno de los mejores comentaristas políticos del momento. Hoy  en el programa de Herrera se comentaba lo de Aznar de anteayer, y lo del aborto a cuenta de la entrevista a Gallardón en el mismo programa.

   Sobre Aznar me ha sorprendido su proclama de considerarlo, junto con González, uno de los buenos presidentes que ha tenido España en este periodo democrático. Y ha dado la razón: la de haber tomado al Partido Popular de entonces, a la sazón un partido desvertebrado e infectado de posturas mostrencas,  para convertirlo en un partido conservador con cara y ojos al mejor estilo europeo. Bueno, pues dado mi  enfado manifiesto en la anterior entrada, asumo esta consideración de mi respetado líder de opinión, y valoro aquellas "cagadas" de Aznar como  "dos malos momentos" en la carrera de un político honesto y eficaz (cosa que por otra parte asumía al principio de la entrada). Fidalgo lo ha equiparado a González, como otro de los grandes presidentes de este periodo, y lo contraponía a Zapatero, con el que de manifiesta muy enfadado.

     Hizo Fidalgo  la consideración general de que en España muchos políticos legislan más con la intención de dar caña a alguien,normalmente a los rivales, que con la intención de mejorar la situación del país. Dijo que eso pasó mucho durante la República, que le pasó mucho a Zapatero... y ahora le ha pasado a Aznar con su entrevista, y quizá con Gallardón sobre el aborto, aún reconociendo que la anterior ley es un tanto deficiente (deja vacíos) en lo que se refiere a la consideración legal del embrión humano.

    La ecuanimidad y visión política de este hombre me siguen sorprendiendo (agradablemente).

martes, 21 de mayo de 2013

¡Ayy.. Aznar!

   Le están dando tanta brea que hasta siento escrúpulo de sumarme  a "la cofradía del santo reproche". Y es una pena, porque creo que fue un hombre fundamentalmente honesto (si, lo creo), y un buen profesional de la política. Pero ¡Ayy! también, y le voy a dar donde le duele, un hombre  fundamentalmente mediocre. Se le subieron los humos y parece ser que al final de su mandato cometió unos cuantos errores de bulto. Aquí voy a comentar dos de ellos que me parecen enormes, con los que se hizo mucho daño a sí mismo, a su partido y a España, y que si fuera mínimamente consciente de ellos  no andaría dando la nota por ahí, como si fuera el rey del mambo.

   Uno fue su actuación el 11-M. Incluso suponiendo que se le tendiera una trampa para que creyese que fue un atentado de ETA, cosa no imposible, está en la precaria situación del que denuncia el haber sido objeto del timo del tocomocho o de la estampita. Como político marrullero y de poca altura se lanzó a aprovechar la circunstancia para asegurarse una mayoría absoluta que se le escapaba por momentos...    y le regaló el triunfo a Zapatero, dejando a los suyos noqueados y sin palabras. ¡Recuerdo al pobre Acebes (del que también creo que es un hombre honesto) proclamando que "el que diga que no ha sido la ETA es un miserable"!   ¡¡vaya papelón!!.   Para que luego salga "el masca" por la tele haciéndose el interesante agraviado con lo de los "lejanos valles y montañas".

   Y el otro es fácil, y casi más tremendo. Es la Foto de las  Azores. Y digo literalmente la foto. Sobre la decisión política no me atrevo a juzgarle. Que el rey Antíoco decida proclamarse aliado del Imperio Romano, y a tal efecto mande un batallón a sus guerras...  pues no sé, a lo mejor tiene sentido geoestratégico. La historia lo juzgará. Pero yo digo la foto... esa en la que están los cuatro mandatarios, y Assnar sale correteando para ponerse al lado de Bush, que le da unas palmaditas... ¡¡Santo Cielo... fue una de las imágenes más ridículas de los noticiarios en varios años!!  ¡Una auténtica afrenta a su dignidad y a la del  país que estaba representando! ... una imagen que me dieron ganas de que me tragase la tierra de vergüenza ajena,  y también propia, en la medida que en ese momento ese señor me estaba representando ante el mundo.

    Soy conservador, y eventualmente votante del PP, lo que no obsta, o tal vez precisamente por eso, para que me cueste perdonar esas dos cagadas, sobre todo la segunda, y para que humildemente me permita aconsejar al Sr Aznar que haga un buen examen de conciencia (si no quiere tener una mala muerte), y que, si no pedir disculpas, que sería lo suyo pero para lo que haría falta una categoría moral que de momento le pilla muy lejos, por lo menos que se retire a un discreto segundo plano. Su mujer, su partido, su país y yo se lo agradeceremos .

El hombre sabio (Merlín)



    Un viejo amigo solterón y navegante con el que intercambio mensajes mientras navega por los mares del mundo, ¡oh maravillas de la comunicación! me decía con melancolía que lo de navegar está muy bien, pero que luego no tiene a ninguna Penélope esperándole. Le contesté contándole una historia de Walt Disney:

     Sí, soy bastante forofo de Disney; creo que el propio Jung en un momento dado alude al género del cine animado (y supongo que del cine en general) como  verdaderas manifestaciones del inconsciente colectivo, con personificaciones actualizadas de sus arquetipos. Una de sus primeras películas, del año 63,  es "Sword in the Stone" , dedicada al mito del rey Arturo, que en españa  se tituló "Merlín el encantador"  y de la que el mago Merlín es ciertamente el verdadero protagonista. Una versión actualizada en clave de comedia infantil del Arquetipo del Sabio. 

   El nudo de la película es la enseñanza que trasmite a Arturo cuando lo adopta como aprendiz. Un formidable máster de vida consistente en ir convirtiendo al muchacho sucesivamente en tres animales : pájaro, pez, y luego ardilla. La reacciones del discípulo siguen el mismo esquema… primero de entusiasmo (¡puedo volar!  ¡puedo nadar bajo el agua!...) para a continuación descubrir las contrapartidas de afrontar la dura vida en la naturaleza. Y la moraleja es clara y vieja, aunque fácilmente la olvidemos: que todo tiene su cara y su cruz. Con entusiasmo asumimos la cara, que rápidamente damos por sentada, para a continuación lamentarnos de la contrapartida. La canciocilla inevitable de todo producto de la casa remata explíticamente  la moraleja: 

                                  Esto es en verdad
 lo que al mundo hace marchar.
Como hay derecho hay revés,
como hay allá hay un acá ,
 y como hay bien también hay mal,
 por cada contra existe un pro...

   Todo esto para concluir  que lo malo es cuando al llegar a Itaca te encuentras Penélope con el ceño más fruncido  que el culo de un camaleón y diciéndote: “¡¡La guerra de Troya hace diez años que se acabó; se puede saber dónde te has metido desde entonces?!

jueves, 16 de mayo de 2013

SALVE FIDALGO


Hoy Jose María Fidalgo ha estado formidable en su tertulia de Onda Cero. Me sumo a la pléyade de sus seguidores, incluido aquellos a los que nos gustaría verle asumir mayores responsabilidades políticas. Aunque probablemente parte de su sabiduría consista en saber hasta dónde puede llegar.

Como digo ha estado magnífico en dos de los debates periodísticos del día:
·         La clonación de células madre.
·         El empeoramiento de la crisis económica, que empieza a alcanzar, con el secreto regocijo de algunos de nosotros, para qué negarlo, al norte de Europa.

Sobre la clonación ha empezado asumiendo el discurso intelectual al uso sobre la bondad del progreso  científico, imparable pese a las reservas éticas o ideológicas de los sectores sociales más conservadores, PERO  que los propios científicos saben (y él puede decirlo con total legitimidad) que cada vez que corren una cortina es para encontrarse con tres cortinas más.   Lo cual viene al pelo con la otra intervención…

Sobre la Crisis económica citó a un economista austríaco de hará una decena de años al que le dieron el premio Nobel, y que en el discurso advirtió del peligro que supone el que a ciertos intelectuales se les haga demasiado caso, incluso cuando hablan de cosas de las que en realidad no tienen ni idea.  

Esto por cierto que es un viejo problema de la humanidad, abordado en textos tan venerables y dispares como son La apología de Sócrates, y la mismísima Biblia, en el mito del pecado original. Sobre el segundo ya he hablado en otra entrada, pero en cualquier caso volveré sobre ambos temas, lo juro. 

lunes, 13 de mayo de 2013

VICTUS, de Sánchez Piñol (Catalunya España 11)


   La novela ambientada en el asedio y conquista de Barcelona en 1714 ha tenido un gran éxito en Cataluña, y algo menos en (el resto de) España. Tengo que reconocer el desasosiego que me ha producido a ratos, a pesar del cual la he leído de un tirón. Mi amigo catalán Jordi me la recomendó encarecidamente, glosándola como un relato imparcial que reparte caña en igual proporción con unos y con otros. Lo que es, en mi opinión, bastante verdad, pero no siempre. Es  cierto que a nivel de personajes la ecuanimimidad es total. Los personajes simpáticos y antipáticos se reparten por igual entre ambos bandos, y están trazados estupendamente. Entre ellos destacan el  noble Vaubán, teórico del arte de la guerra, el bandolero-patriota Ballester, y sobre todo el formidable general Villarroel, que resulta que era castellano.

    En ese sentido la novela es impecable, y en el sentido narrativo también. Se lee estupendamente. Y el trasfondo histórico parece muy currado. Jordi sabe bien porqué me la recomendó: el personaje resulta ser un iniciado en el arte de Vauban, el gran ingeniero militar de las formidables fortificaciones del siglo XVIII, por las que siento gran debilidad. Y ciertamente describe con golosa minuciosidad no solo la implacable lógica de aquel tipo de fortificación y asedio, sino que desciende al detalle cotidiano de la rastrera y miserable vida de los zapadores en las trincheras, hundidos en el barro y machacados por la artillería... En ese sentido la novela es una morbosa golosina para el aficionado al relato militar, como es mi caso.

    ¿Entonces, porqué el desasosiego?. Porque si bien a nivel de personajes la ecuanimidad es total, no lo es tanto a nivel de valoraciones globales; en otras palabras, del discurso político. No es que se pase mucho, pero cuantas veces en el libro habla genéricamente de los españoles, o los castellanos, es siempre para pintarlos con una pésima imagen, y en todo caso explícitamente peor que la de los catalanes: Brutos, crueles, zarrapastrosos, tiránicos, intransigentes.... frente a una sociedad catalana encantadora, amiga de las libertades, liberal... etc. Un discurso bastante corriente en muchos catalanes, y por cierto introyectado por muchos españoles que dolorosamente ven a Cataluña como una de las mejores partes de España, que sin embargo no quiere serlo,  o no se siente tal, al menos en parte (Como le pasaba a mi  propio padre: Véase  "Cataluña Espanya 1")

   Por otra parte, no sé si por ambivalencia, o por compensación cármica, en algún momento el contraste entre unos y otros toma cierto cariz de la voluntad política, o de la fuerza identitaria, que en este caso llega a ser elogioso para los castellanos. Algo así como el contraste entre el Barça y el Madrid. El Barça es el que mejor juega al fútbol, pero el Madrid es el que al final gana por su indomable moral de victoria (la frase es de Luis Aragonés, creo). Unas virtudes de austeridad e hidalguía que, con no poco amor, personaliza en Villarroel. Lo que contrasta con la mala uva con la que se recrea una y otra vez con la (presunta) necia estupidez de los dirigentes barceloneses, a los que llama felpudos rojos, y a los que machaca sin tregua ni piedad, con una saña que probablemente también sea excesiva.

    La novela es muy amena, y la tensión narrativa va creciendo a medida que se acerca el fatal desenlace (el once de septiembre), en el que alcanza tintes épicos, sazonados de desmitificadores detalles de ese humor negro que tanto gusta a los catalanes y también a los españoles. Un final verdaderamente apoteósico que ciertamente tiene que haber sido muy del gusto de la intelectualidad catalana. Me emocionó incluso a mi, aunque estoy en el bando de "los malos".

    Vale decir que, a pesar de ese contraste, en el que me extiendo porque refleja muy bien una cierta actitud  que los castellanos encontramos, o nos lo parece, en los catalanes, y que despierta no poca antipatía. Pero tengo que reconocer que no es una novela de buenos y malos, y que posiblemente ese matiz sea inapreciable para un no-castellano, y que quizá está magnificado por nuestra propia atormentada autoestima.

     Una última curiosidad. A Villarroel lo pinta como un militar profesional (castellano) que entonces, como los futbolistas de ahora, podían fichar sin merma de su honor por uno u otro bando, como también es el caso del  atribulado protagonista. Cuando el  inevitable final es inminente, según la novela, Villarroel tiene ocasión de irse de la ciudad, cosa que está a punto de hacer, aunque al final se queda, identificado con el heroísmo de unos ciudadanos que luchan hasta el final, aunque ya no hay ninguna esperanza, lo que podría ser bastante histórico. Hay última carga, ya en las refriegas finales, cuando las tropas borbónicas ya han entrado  en el casco urbano, que Piñol cuenta con un emocionado y contenido sentido épico, pero no menciona una última arenga que Villarroel lanza  a los combatientes: "¡estáis luchando por nosotros y por toda la nación española!".

     

jueves, 7 de marzo de 2013

Caudillo

   Se ha muerto Chávez, y nos quedamos todos alucinados de las muestras de dolor colectivas del personal venezolano. Nadie se atreve a negar que al hombre realmente se le quería. Claro que tampoco hay que alucinar, porque un diez por ciento de la población armando follón  arma un follón de narices. Pero creo que es algo más que el diez por ciento de la población la realmente consternada; basta con mirar los últimos resultados electorales.

    Inevitablemente me recuerda a lo que pasaba con Franco... salvando las distancias, o no. La progresía dirá lo que quiera, y montarán película tras película para convencernos de lo contrario, pero lo que yo recuerdo es que la mayoría de la gente quería a Franco. Ello derivó en uno de los eslóganes característicos del principio de la democracia: "Con Franco vivíamos mejor". Y de él una de las ocurrencias más geniales de la misma época: la de Vazquez Montabán, parodiando a la anterior, y al mismo tiempo a la propia progresía, de la que era miembro insigne : "Contra Franco vivíamos mejor"   ...¡que frase colegas!  Yo la he parafraseado en este blog aplicándola al conflicto con los Catalanes: ¡A ver si en un futuro independizado alguno  acabe diciendo que "Contra Espanya vivíamos mejor"!

    Volvamos a Chávez. Lo que nadie dice es la base de su éxito. El único análisis en ese sentido se lo oí a un sociólogo, tal vez Venezolano. El gran éxito de Chávez fue incorporar a la dinámica política a una masa de población que normalmente pasa olímpicamente del ella. ...ejem ... ¿el pueblo? ... ¿el pueblo llano?...en fin, el que sea; el caso es dar voz   a un sector de la población que normalmente no la tiene. Esa fue su virtud del líder. Lo que hizo de Chavez un caudillo.  ¿También lo fue el de Franco?

     En el fondo de esta cuestión hay un tema del que los intelectuales se olvidan continuamente: Ellos son la nueva aristocracia. Conocimientos, másters, licenciaturas, dobles licenciaturas, publicaciones, seminarios, premios, congresos... la fuente de prestigio social más importante actualmente es la titulación académica.  Y aunque en un momento dado parte  del pueblo se apunte, o imite, a la casta dominante, como otrora los petimetres imitaban los modales de la nobleza, o los obreros introyectaron la moral del trabajo de sus patronos protestantes... pero que no se equivoquen... ellos ni son el pueblo, ni como clase están realmente por él. Lo que explica el "ruido de fondo"  anti-intelectual de todas las sociedades modernas...  y la  propensión a la periódica aparición de líderes que la encarnan.   No dudo en meter en esta categoría a personajes siempre pintorescos ¿Se acuerdan de Gil?, o el mismo Berlusconi, Ruiz Mateos, ... y por supuesto al "pepito grillo" recién surgido en Italia.

    Volveremos sobre lo de la "nueva aristocracia"

martes, 19 de febrero de 2013

Espionaje: ¡Quien con niños se acuesta...!

    Todo esto del espionaje resulta un poco chusco, y se presta como nada a que los tertulianos se pongan como locos rasgándose las vestiduras. Y mi mas bien me hace gracia... ¿espiar qué?. ¿para qué?    En los medios conservadores ahora se escandalizan mucho del intento de implicar a la Sra. Camacho, con cierta razón porque desde luego no parece tener mucho sentido, apriori, que, además, la susodicha se prestara a hacer de Anacleto, agente secreto  (por mencionar a otro de los grandes dibujantes de cómic).

     Ahora bien: "apriori" "además"... No le voy a negar a la dirigente del PP en Cataluña el coraje con el que cumple su difícil papel, que tiene que ser bastante peliagudo. Pero no puedo dejar de preguntarme ¿porqué accedió a reunirse con esta señora? ¿qué esperaba obtener, o qué esperaba que podía hacer en ese asunto?   Por eso lo de "además". Creo que ella dice que la entrevista se la pidió la Sra Alvarez. Me lo imagino... como también me imagino que, una vez aceptada la reunión era mejor hacerla en publico.

     De cualquier forma creo que hubiera sido mucho mejor que la Sra.Camacho no entrara en esas intrigas de opereta, y que fuera consciente de que la líder de un partido que se supone serio no tiene nada que hablar en una situación como esa... Porque suponiendo que la Sra Álvarez le contase el mayor marrón del mundo ¿que puede hacer ella sino decirle que vaya a la policía y lo denuncie? ¡Pues que se lo hubiera dicho de entrada!. En fin, probablemente sea el menos grave de los aspectos de este asunto, pero creo que la Sra. Camacho se equivocó al acceder a esa entrevista, y a la vista están los resultados; ya se sabe, quien con niños se acuesta...!

sábado, 2 de febrero de 2013

CRISIS EN (el partido de) EL GOBIERNO


     Sería la leche que todo este movidón  de las corrupción y del asunto Bárdenas acabase provocando un adelanto de las elecciones, y que el PP perdiese el Gobierno …  y que subiese el PSOE  … ¡beneficiándose de la salida de la crisis!.  Sería realmente como para paranoizar una mano negra verdaderamente maquiavélica.  En Génova deben estar campando todos los demonios de este mundo y de los otros alucinando con esa posibilidad.

     Sugestivo, pero demasiado. No creo que la realidad pueda anticiparse a ese nivel de detalle, ni siquiera por los sociatas…  aunque si alguien son capaces de hacer algo así son ellos. Algo parecido ocurrió del 11-M.  Pudiera ser que tuvieran la bomba guardada para soltarla en el momento adecuado.     Por otra parte quien soló la primera andanada fue El Mundo… lo que hace pensar que la mano negra en cuestión es la misma proporcionando “combustible” a unos o a otros.  

     En cualquier caso lo que es muy sorprendente es que el PP haya permitido “crecer” este marronazo en su seno. Imagin que gestionar estas grandes organizaciones, e impedir que se te llenen de “espabilados” debe ser bastante difícil.  En este sentido al principio incluso se pensó en una “autovoladura” de los propios cuadros del PP para librarse de parásitos, ahora que la cosa parece que empieza a ir mejor;  pero claro…

   Y la otra es la ínclita Esperanza, quitándose de en medio justo antes de que empiecen las primeras descargas de fusilería… ¡no se si vale para encontrar gente que vale, pero ciertamente, para la política, ella si que vale!

     Dios quiera que toda esta catarsis sea para bien. 

domingo, 27 de enero de 2013

La reforma laboral




    Los desoladores datos de la reciente Encuesta sobre la Población Activa, indicando que el paro en España ha alcanzado la cifra de 6 millones de ciudadanos, han reavivado el debate sobre la pertinencia de las políticas de ajuste que está llevando a cabo el gobierno. Hay un aspecto de ese debate que creo que vale la pena comentar: los efectos de la reforma laboral facilitando el despido.  En general desde posiciones progresistas, y desde las afines al sindicalismo, se hace el razonamiento diáfano de que, si es más fácil despedir, los empresarios despedirán más. Y que por tanto esta reforma laboral está contribuyendo a que haya más paro.

      Con las reservas que supone ponerse a opinar sobre un asunto tan espinoso, que tiene tantas consecuencias sobre la vida la vida de la gente, creo que ese argumento adolece de un cierto cortoplacismo. Si los empresarios están aprovechando esta ley para despedir a gente, quiere decir que el negocio no les está dando como para mantener a los empleados que tienen. Nadie despide trabajadores si el negocio está funcionando bien. Si resulta que los empresarios las pasaban canutas para ajustar sus plantillas cuando las cosas se ponían mal. ¿cual es el efecto a largo plazo? Pues evidentemente que a la hora de contratar, cuando las cosas van bien, serán lo más ajustados posible. A mi me parece como muy de cajón; es lo que yo haría si fuera empresario.

     Ciertamente las cosas no son tan sencillas, porque por otra parte el despido de trabajadores tiene un efecto automultiplicativo al disminuir el poder adquisitivo de la población en general. Así que me hago cargo de lo difícil del problema: no voy a defender la aplicación masiva de políticas ultraliberales. Pero me temo que en este aspecto particular sí creo que tienen razón.  Parece fuera de toda duda que  la gran fuente de empleo es la iniciativa privada; hoy por hoy las cosas son así. Y además en nuestro país, no sé si en todos, es principalmente el pequeño y mediano empresario. Si el aumento del paro viene dado principalmente por la terrible mortandad de pequeñas y medianas empresas, parece bastante lógico que lo primero que hay que hacer es facilitarles las cosas, lo que incluye dolorosamente el que puedan ajustar sus plantillas lo más fácilmente posible.

     En todo caso proclamo una vez mas la necesidad de una visión sistémica, y de evitar las posiciones maniqueas de buenos y malos, tan tentadoras ahora que hay mucha gente pasándolo muy mal.